La tragedia es un género literario y teatral que se caracteriza por representar situaciones graves y conflictivas que conducen a un desenlace fatal o a la ruina de los personajes. Su origen se remonta a la antigua Grecia, donde las obras trágicas abordaban temas como el destino, la culpa, la pasión, la violencia y las emociones humanas profundas. Los protagonistas suelen ser personajes de alta estatura social, cuyas acciones y decisiones desencadenan una serie de eventos desafortunados que culminan en su caída. La tragedia busca provocar en el público una respuesta emocional intensa, a menudo a través de la catarsis, que es la purificación o liberación de sentimientos. Elementos comunes en la tragedia incluyen el uso del monólogo, el conflicto interno de los personajes y la presencia de un coro que ofrece comentarios sobre la acción. Entre los dramaturgos más destacados del género se encuentran Sófocles, Eurípides y Shakespeare. La tragedia no solo se limita al teatro, sino que también puede encontrarse en la literatura, el cine y otras formas de arte que exploran la condición humana y sus dilemas más profundos.
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