Pastel de Camote con Whiskey, Nueces y Malvaviscos
Un plato reconfortante y decadente perfecto para reuniones festivas u ocasiones especiales. Este Pastel de Camote con Whiskey combina la dulzura natural de los camotes con un toque de whiskey, añadiendo profundidad y complejidad a cada bocado. Cubierto con nueces crujientes y malvaviscos pegajosos, este plato es una mezcla encantadora de sabores y texturas.
Ingredientes:
- 4 camotes grandes, pelados y cortados en trozos
- 1/2 taza de mantequilla sin sal, derretida
- 1/2 taza de azúcar morena, compacta
- 1/4 taza de crema espesa
- 1/4 taza de whiskey de bourbon
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 1/2 cucharadita de canela molida
- 1/2 cucharadita de nuez moscada molida
- 1/2 cucharadita de sal
- 1/4 cucharadita de jengibre molido
- 1 taza de nueces picadas
- 2 tazas de malvaviscos mini
Instrucciones:
- Preparar el Horno: Precalienta tu horno a 350°F (175°C). Engrasa ligeramente un molde para hornear de 9×13 pulgadas.
- Cocinar los Camotes: Coloca los trozos de camote en una olla grande y cúbrelos con agua. Lleva a ebullición a fuego medio-alto y cocina hasta que estén tiernos, aproximadamente 15 minutos. Escurre y transfiere a un tazón grande.
- Reducir los Camotes a Puré: Usando un machacador de papas o una batidora eléctrica, reduce los camotes a puré hasta que estén suaves. Agrega la mantequilla derretida, azúcar morena, crema espesa, whiskey, extracto de vainilla, canela, nuez moscada, sal y jengibre. Mezcla hasta que esté bien combinado y esponjoso.
- Armar el Pastel: Extiende la mezcla de camote machacado de manera uniforme en el molde preparado. Espolvorea las nueces picadas de manera uniforme encima, seguido de una capa pareja de malvaviscos mini.
- Hornear: Hornea en el horno precalentado durante 20-25 minutos, o hasta que los malvaviscos estén dorados y ligeramente crujientes en la parte superior.
- Servir: Permite que el pastel deje enfriar unos minutos antes de servir. ¡Disfruta de este decadente pastel de camote con whiskey como un acompañamiento que seguramente impresionará a tus invitados!
Este plato combina la sustancia de los camotes con el toque suave y reconfortante del whiskey, y la delicia azucarada de los malvaviscos, convirtiéndolo en la máxima comodidad culinaria digna de un festín.